Filipinas - Parte II - Boracay

Tras pasar unos días en El Nido, paraíso del que os hablé hace unas semanas, nos fuimos a otra isla: Boracay. 

Como os conté anteriormente, el viaje fue memorable por la llegada del tifón Pablo que, sin embargo, podemos decir que se portó "bien" con nosotros...

Un día más tarde de lo previsto, pues, llegamos a Boracay. Desde el momento en que bajamos del avión, supimos que nos iban a esperar 4 días muy distintos a los vividos en el Nido. Los alrededores del aeropuerto estaban plagados de pancartas anunciando fiestas de discotecas e, incluso, la reciente apertura de un McDonald's. En un primer momento pensé que Boracay iba a ser un Ibiza de Filipinas, pero la verdad es que, aunque hay mucho turismo, sigue habiendo playas poco frecuentadas por los turistas. Además, la puesta de sol es preciosa aunque uno esté rodeado de decenas de turistas que parezcan estar compitiendo por tomar cuantas más fotos por minuto mejor.

Boracay ofrece playas bonitas, cenas sobre la arena escuchando el romper de las olas de fondo, bares con música en directo para todos los gustos, masajes en la playa profesionales y baratísimos, agradables paseos en "paraw" (velero típico de Filipinas)...

Pero... Una imagen (o varias) vale más que mil palabras, no?...

Sampaguita... Qué bonita y qué bien huele!

Forma original de "disimular" el extintor!

Comimos en un restaurante (MoonZone) regentado por un catalán que ha querido dejar su huella en la carta!

Básculas del aeropuerto... Pura modernidad!!

Mientras estábamos en Boracay, mi madre descubrió que uno de los hoteles a primera línea de playa tenía una webcam y... ¡resultó que nos pasamos un par de mañanas en las tumbonas de dicho hotel! Casualidades de la vida... Os dejo el link, para que disfrutéis de una puesta de sol desde la distancia... ¡pero en directo!

www.earthcam.com/cams/philippines/boracay/?lang=es